Ultimátum presidencial a Guzmán: baja la inflación o se va en agosto

Ultimátum presidencial a Guzmán: baja la inflación o se va en agosto

Alberto Fernández quiere resultados concretos del plan del ministro de Economía.


El presidente Alberto Fernández le puso fecha de caducidad al plan de su ministro de Economía, Martín Guzmán: si en agosto no hay resultados contundentes en la guerra contra la inflación, habrá un inevitable recambio en el Palacio de Hacienda.

El ministro de Economía, que es apuntado cada vez con mayor contundencia y constancia por la vicepresidenta Cristina Kirchner, deberá mostrar una mejora en el rumbo de la economía para darle motivos al jefe de Estado para defender su permanencia en el cargo contra el insistente reclamo de sectores mayoritarios del Frente de Todos que piden su salida desde hace meses pero que ahora cuentan con un aliado clave: la proximidad del año electoral.

Aunque el Presidente no ahorra gestos de respaldo y esta semana incluso desde Alemania defendió la política de reducción del déficit fiscal que el ministro de Economía había hecho ante una nueva embestida de Cristina, en el Gobierno admiten que “hay un plazo” para “poder mostrarle resultados concretos a los que tal vez no creían que íbamos por el camino correcto”. Una clara referencia a los cuestionamientos que, desde el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, hace el kirchnerismo.

La fecha clave que marcó el Presidente, según afirmaron fuentes oficiales a Clarín, es agosto. El número de inflación de ese mes, agregan, debe mostrar “una tendencia decidida a la baja y no tanto en una meseta como está ahora”.

No habrá margen para excusas. Ni la pandemia, ni la invasión de Rusia en Ucrania y, ni siquiera, el endeudamiento con el FMI dispuesto por Mauricio Macri.

Negada históricamente por el kirchnerismo, la inflación y el aumento de precios de los alimentos son dos de los ejes sobre los que machacan Cristina y La Cámpora para esmerilar la gestión de Guzmán. Por el contrario, con esas dos variables acomodadas (no se animan a ponerle cifras a esta consideración), creen en el Gobierno que no habrá motivos para seguir discutiendo en torno a nombres.

Pero el tema va más allá de los cuestionamientos K o del respaldo de Fernández a Guzmán: lo novedoso es que por primera vez se acumulan más voces cercanas al Presidente que consideran “inevitable” un cambio en el área, pero no para oxigenar el vínculo con la vicepresidenta sino para generar nuevas expectativas en sectores de poder y empresarios.

El Presidente sabe que en campaña no son recomendables cambios en áreas importantes. Entre otras cuestiones por la inestabilidad que implica para el que asume. Por ahora, de todos modos, el jefe de Estado rechaza a quienes le sugirieron que, tras disponer la salida de Matías Kulfas de Desarrollo Productivo casi a pedido de Cristina, era momento de hacer un rediseño completo del área. Uno de ellos fue el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, otro detractor de Guzmán.

Qué se dice del tema...