La puesta en marcha del trabajo de ayuda social del Ejército junto con la agrupación kirchnerista La Cámpora y las Madres de Playa de Mayo en La Carbonilla, una villa de La Paternal, reavivó la polémica respecto del rol de las Fuerzas Armadas. El legislador Maximiliano Ferraro (UNEN) cuestionó con dureza el despliegue de soldados en villas porteñas y anticipó que le pedirá al gobierno de la ciudad que informe si autorizó o no las tareas sociales de la fuerza que encabeza César Milani .
“Es preocupante y triste ver como un organismo de derechos humanos y una agrupación política se relacionan con un represor e imputado por delitos de lesa humanidad como Milani. El Ejército no debiera actuar salvó alguna situación de emergencia o catástrofe”, apuntó Ferraro.
El legislador porteño deslizó que el jefe del Ejército podría realizar “tareas de inteligencia” en las villas de la Capital. “Los argentinos ya sabemos que es lo que ocurrió en el país cuando se le dio al Ejército un rol político y despliegue territorial”, remarcó.
Desde principios de año, efectivos de esa fuerza desarrollan actividades similares en Florencio Varela. Pero ésta es la primera vez que las tareas se despliegan en la Capital Federal.
“En La Carbonilla debieran estar presentes los gobiernos de la Ciudad y de la Nación actuando de forma conjunta para solucionar los problemas de extrema pobreza y hábitat que hoy atraviesan miles de ciudadanos”, concluyó Ferraro.