El secretario general del gremio de colectiveros, Roberto Fernández sostuvo que si no acceden a pagar el aumento salarial acordado vuelven al paro.
La huelga había comenzado después de que la Unión Tranviarios Automotor (UTA) denunció la negativa de las cámaras empresarias a otorgar un 23 por ciento de aumento salarial y advirtió sobre posibles despidos.
En este contexto el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, logró levantar el paro con un aumento del 18 por ciento para enero, febrero y marzo, y de 23 por ciento a partir de abril. El gremio acató pero puso el 20 de este mes como límite para empezar a percibirlo.
En caso de que lo acordado no se cumpla, los micros de larga distancia volverían a parar el próximo martes si antes el Gobierno no deposita la primera cuota que se comprometió a pagar el último 7 de mayo, tras cinco días de paro que dejaron varados a 400 mil usuarios.
Fernández insistió en que este lunes los trabajadores irán al Ministerio de Trabajo, esperarán las 24 horas que rige el plazo de la conciliación obligatoria, “y si no hay respuestas, el martes comienzan las medidas de fuerza”.