Vecinos de Pilar piden ampliar un arroyo por la inseguridad

Vecinos de Pilar piden ampliar un arroyo por la inseguridad

Habitantes del barrio Monterrey Sur quieren que se levanten los puentes peatonales ilegales y que se amplíe el cauce, para obturar las posibilidades de los ladrones. Es en el límite con José C. Paz.


Hartos de la ola de inseguridad, los vecinos de un barrio de Pilar pidieron la insólita medida de ampliar el arroyo Pinazo, que los separa de la localidad de José C. Paz. “El Municipio nos prometió que se van a clausurar todos los pasos ilegales existentes. También que van a trasladar maquinaria pesada hasta la zona para desarmar aquellos que ya estaban construidos sobre el riachuelo”, dijo Eduardo Purky, presidente del Foro de Seguridad de Monterrey al diario Muy.

Según afirman, las medidas le dificultarían a los delincuentes pasar de un lado al otro. La decisión de remover los puentes fue tomada la semana pasada en una reunión entre los vecinos, con presencia del jefe Distrital de Pilar, Jorge Aguilar, quien dijo que tras la solicitud, enviaron un patrullero, una camioneta y cuatro nuevos efectivos. Los habitantes también pidieron la presencia de policía montada, ya que los ladrones escapan por campos y vías férreas.

“A mi vecino le hicieron una entradera y los ladrones mantuvieron de rehenes a cinco personas. Se debe mejorar la seguridad en la zona, y una de las maneras es limitando el acceso desde el Barrio Sol y Verde de José C. Paz, desde donde viene gente a cometer robos. Queremos que el arroyo sea más profundo y ancho detrás de la escuela 15”, dijo Guillermo Mejter, presidente de la Sociedad de Fomento Monterrey Sur.

El arroyo Pinazo es la división entre Moreno, José C. Paz y Pilar. Para cruzarlo existe un único puente vehicular y peatonal sobre la ruta 234, situado a un costado del barrio Toba. Para ahorrar tiempo, muchos vecinos decidieron levantar cruces precarios a lo largo del cauce del arroyo. La próxima reunión de los vecinos del barrio se realizará el 13 de marzo.

En agosto de 2012, en Quilmes, vecinos reemplazaron un alambrado por un paredón para evitar que los ladrones circulen por las vías del tren. Poco más de un año después, también en Pilar, los habitantes de La Alborada bloquearon los principales accesos al barrio para no dejar que ingresen extraños. En enero de este año, en Temperley y a igual que en Quilmes, los vecinos construyeron un muro de casi tres metros para evitar que delincuentes escapen por las vías del ferrocarril Roca.

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