Se confirmó que desde la próxima semana la SUBE estará disponible en las boleterías de toda la red al costo oficial de $ 25. Así, además de beneficiar a los pasajeros que no tienen el plástico, buscan evitar los sobreprecios que muchas veces se cobran en kioscos y otras bocas de expendio.
La SUBE es el principal medio de pago para viajar tanto en subte como en colectivo, que también dejó de aceptar monedas en diciembre del año pasado. Desde ese momento, y a partir de mayo, cuando dejó de correr la Subtepass, se volvió frecuente escuchar, frente a los molinetes, o en las paradas de los colectivos, pedidos solidarios de gente que, o porque se olvidó la SUBE o directamente no la tiene, necesita que otro le pague el viaje.
“La tarjeta sube es una herramienta indispensable para acceder al transporte público. Por eso propusimos que se vendan en boleterías del ferrocarril y el subte”, dijo el Defensor del Pueblo, Alejandro Amor, y agregó: “Además, contribuiría a disminuir los abusos por parte de los vendedores que le ponen un sobrecargo indebido”.
Según fuentes del Gobierno nacional, la implementación en boleterías de estaciones ferroviarias está en evaluación, y aclararon que en cabeceras como Retiro o Constitución, hay centro de atención SUBE que venden las tarjetas.
Los recargos en la venta y la recarga siguen sucediendo pese a los controles que se hacen desde el ministerio de Transporte. En total hay 11.000 puestos oficiales, y en la página web (www.sube.gob.ar) se puede hacer la denuncia. La tarjeta también se vende en los 8 centros de atención turística que hay en la Ciudad. Allí no hay que pagar por el plástico, pero para activarlo hay que cargarle los $ 25 de saldo negativo y comenzar a usarlo.