La candidata a gobernadora de Buenos Aires por el frente Cambiemos, María Eugenia Vidal, cerró hoy su campaña electoral con una caravana por el Gran Buenos Aires durante la cual apostó a que el domingo próximo habrá un “cambio de boleta” y que después de los comicios “van a quedar pocos barones” del Conurbano.
Vidal unió el norte y el sur del conurbano con una recorrida por los municipios de Pilar y Quilmes, e hizo una escala en La Matanza, el distrito con mayor votantes de la provincia.
A bordo de una combi con periodistas de distintos medios, entre ellos DyN, Vidal deslizó la posibilidad de que haya alguna práctica fraudulenta durante las elecciones al advertir: “Estamos preparados, estamos listos, vamos a tener un fiscal en cada mesa, vamos a estar alertas”.
Asimismo, Vidal rechazó la posibilidad de que pueda haber un “corte de boleta” que plantee un escenario de ballottage en la categoría de Presidente pero que la convierta en gobernadora bonaerense y afirmó que después del domingo “van a quedar pocos barones”.
Acompañada por el candidato a vicegobernador que completa su fórmula, el radical Daniel Salvador, Vidal llegó a las 10 a la plaza 12 de Octubre, ubicada en el centro de Pilar, donde la esperaban decenas de personas que llevaban globos de colores y gorras con el nombre del candidato a intendente de Cambiemos: “Ducoté (Nicolás) intendente”.
Después de sacarse varias fotos con militantes y vecinos que se acercaron a apoyarla, Vidal brindó una conferencia ante los medios presentes y aseveró: “Apuesto a un cambio de boleta. Muchos de los que hay todavía dudan o los que no nos eligieron como primera opción pero quieren cambiar, nos van a acompañar”.
Sobre sus expectativas para el domingo, se manifestó “muy confiada” y avisó que van a “denunciar si hay alguna irregularidad”.
Después de unos 15 minutos en la plaza de Pilar, Vidal subió la combi que la llevó a la localidad de Ramos Mejía, perteneciente a La Matanza, y a las 11.30 bajó del vehículo a la altura 14000 de la avenida Rivadavia.
Militantes la recibieron con el canto de “ahora, ahora, Vidal Gobernadora”, con gritos de “vamos, Mari, la rompemos el domingo” y hasta pedidos como “saca la corrupción de La Matanza”.
Acompañada por el candidato a intendente de Cambiemos, Miguel Saredi, Vidal declaró ante la prensa: “Estoy convencida de que la gente va a votar un equipo que es consistente y coherente desde la punta de la boleta con Mauricio Macri y Gabriela Michell hasta el último candidato a consejero escolar”.
Por su parte, Daniel Salvador expresó que vive “con un gran orgullo de poder integrar una fórmula con María Eugenia” y consideró que su propuesta “es la mejor manera de recuperar valores esenciales de la democracia que lamentablemente con este gobierno se han perdido”.
En su paso por Quilmes, de donde es oriundo su principal rival en la elección, Aníbal Fernández, la candidata de Cambiemos recibió el aliento de la gente y hasta regalos, como el que le hizo una mujer al entregarle un rosario para que le traiga suerte en los comicios.
Escoltada por el candidato a intendente Martiniano Molina, Vidal estuvo unos minutos en la peatonal Rivadavia, alrededor de las 12, donde los militantes de su partido político arengaron con cánticos como “a La Morsa le vamos a ganar” o “se va a acabar, se va a acabar esa costumbre de robar”.
Vidal recordó en cada una de sus conferencias que para la categoría de gobernador en Buenos Aires “no hay ballottage”, por eso instó a que la gente haga un “voto consciente” el domingo próximo.
