La gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, continúa mostrando una gran avidez y tacto para manejar las temáticas que causan polémica. A diferencia de sus pares de la Ciudad y de la Nación, Vidal prefiere no dejar que se propaguen críticas a su gestión.
Al respecto de los 25.000 millones de pesos que Mauricio Macri le había girado a la Provincia y que había despertado la furia de varios gobernadores provinciales del país, volvió a aclarar el asunto, por segunda vez.
En esta oportunidad, señaló que “todas las provincias reciben más de lo que aportan” por parte de la Nación, salvo Buenos Aires, y explicó que con esta última transferencia, se aportaron “9.500 pesos por cada vecino contra 30.000 pesos que reciben el resto de las provincias”.
“Los gobernadores se vieron beneficiados por el congelamiento del fondo del conurbano. Estos fondos que se transfirieron no son para este año, son del año pasado”, dijo la mandataria.
Además, destacó el acompañamiento manifestado por el presidente Mauricio Macri en el reclamo bonaerense ante la Corte Suprema para descongelar más fondos.
Sobre el manejo presupuestario de la Provincia, Vidal estimó que “el proceso tiene mucho para mejorar en el cuidado de los recursos de la gente” y dio ejemplos de distintas áreas donde se realizaron ahorros, como el caso de la publicidad oficial donde “en un año pasado con inflación de más del 30 por ciento se gastó menos de la mitad que el Gobierno de (Daniel) Scioli había gastado en 2015”.
Consultada sobre la gestión de Scioli, afirmó que “después de ocho años cada vecino sabe quien es” él, “lo que prometió y no cumplió”.
“(El vecino) no necesita que yo se lo diga. Ya tuvo su tiempo y su oportunidad. No comparto su gobierno y tengo profundas diferencias con él. Pero el periodo de la pesada herencia pasó y yo me hago cargo de lo que hay hoy en la Provincia, me hago responsable”, subrayó.