Mientras desayunaban en el hotel Hermitage de Mar del Plata, los Macri y Vidal fueron testigos de una aparición inesperada: el gobernador Scioli pasaba a saludar.
De sorpresa, pero no espontáneamente, Scioli demostró una vez más su habilidad para las relaciones interpersonales en la política. Tras encontrase el viernes por la noche con Sergio Massa en la inauguración de un hotel del gremio gastronómico, pocas horas después saludaba a un rival en la carrera presidencial.
“Scioli pasó a saludar mientras desayunaban. Después volvieron a charlar en el lobby del hotel. Había clima distendido y a Mauricio se lo veía contento”, informó a NU una fuente que estuvo presente.
Eso sí, no hubo fotos que registraran el encuentro, aunque no se puede determinar con exactitud quién fue el que no quiso retratar el encuentro.
Igualmente, desde el macrismo eran los que ya habían dejado trascender que no querían concretar el partido de fútbol con el equipo sciolista de La Ñata porque creían que la foto le iba a servir más al gobernador que al jefe de la Ciudad.
Los Macri y Vidal estaban en Mar del Plata en lo que fue el puntapié inicial de la campaña proselitista con los tres juntos en territorio bonaerense. Ayer los jefes del Ejecutivo porteño almorzaron con pesqueros y recorrieron La Feliz, y hoy se sumó el intendente de Vicente López.
