Todo sube, parece figurita repetida, pero es real. Julio empezó con aumentos en las naftas y el gasoil que aplicó YPF , la mayor petrolera del país, bajo control del Estado. Los aumentos fueron del 5%, cuando estaba previsto que las subas en los surtidores fueran del 3%. Con la suba aplicada, los precios de los combustibles de YPF acumulan un alza del 18% en el año.
Aunque una de las últimas gestiones del exministro de Energía Juan José Aranguren había sido acordar con las empresas del sector un esquema paulatino de aumentos en los próximos meses, la depreciación de la moneda local, que se acentuó en los últimos días, volvió a poner presión a los surtidores.
Eso se debe a que el barril de petróleo, materia prima que representa un 80% del costo de los combustibles, tiene su precio en dólares.
La nafta súper de YPF cuesta por litro $27,83, en comparación con los $26,50 que regían hasta el sábado a la noche. Mientras que la premium pasó de $30,74 a $32,20; el gasoil, de $23,05 a $24,20, y el gasoil premium, de $26,95 a $29,01. El resto de las compañías seguirán el movimiento de YPF.