Lamentablemente, la hermosa ciudad de Buenos Aires es un caos. Se encuentra apestada de basura acumulada.
Si uno analiza el tema superficialmente estamos frente a un conflicto gremial. Sin embargo, la problemática de fondo es la falta de implementación de la Ley de Basura Cero aprobada en noviembre del año 2005. El plan que proponía la Ley era la progresiva reducción de la cantidad de basura que se entierra mediante la reducción en la generación de residuos y el crecimiento de las industrias asociadas al reciclado.
También nos encontramos con la incapacidad para dar respuestas operativas frente a una crisis. A modo de ejemplo en el año 2002 en un conflicto similar desde las áreas de la Subsecretaría de Emergencia recolectamos lo residuos para mitigar las consecuencias de la basura acumulada por tiempos prologados y los posibles focos infecciosos.
De igual modo, desde la misma repartición, en los momentos de cortes de luz se convocaba al Centro de Operaciones de Emergencia con el objetivo de asistir a los vecinos más vulnerables. El objetivo era supervisar la situación de los hospitales, geriátricos y apoyar con grupos electrógenos a las personas electro dependientes. Es decir, había una fuerte voluntad política de reducir las consecuencias negativas de la crisis poniéndonos al servicio de los ciudadanos.
Sin embargo, nuevamente el Ingeniero Macri en lugar de ponerse al frente de la situación y conducir el conflicto, busca evadir su responsabilidad institucional desviando la atención: en esta oportunidad, convocando al cacerolazo.
Macri, sos Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Por favor, intentá estar a la altura de las circunstancias.
Lía María
Ex Ministra de Espacio Publico del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires