Por fin, luego de nueve años de distintos gobiernos del mismo color político, y de decenas de años de irregularidades, el Estado argentino decidió, a través de la AFIP, terminar con las enormes y gravísimas irregularidades de muchos intermediarios (exactamente 146) relacionadas con evasión y elusión fiscal. Más allá de que el Estado necesite más que nunca los dólares por el cepo cambiario, la necesidad de intervenir en este tema de los pases triangulados y todo tipo de fraudes con los derechos económicos de los futbolistas tiene el doble respaldo de la cuestión ética y de control, pero también por ser el Estado el gran aportante de los ingresos de los clubes desde que en 2009 se hizo cargo del programa Fútbol Para Todos.
Lo que más satisface a Salvemos al Fútbol es que por fin, un buen porcentaje de su proyecto de ley presentado en el Congreso de la Nación en 2008, y que dormía en los cajones de los parlamentarios, referida a la Declaración Jurada Deportiva Anual, fue tomado por esta resolución de la AFIP, aunque ésta es la punta del iceberg y hay mucho más por investigar.
Nos quedan demasiadas preguntas que nos formulamos en este artículo. Si esto no representa una avanzada para una intervención futura (formal o no) en el fútbol argentino, o si, al contrario, sólo se trata de la búsqueda de dólares y en lo posible, sin tocar a la AFA, a la que tanto se le teme (tanto, que la AFIP colocaría un interventor que fiscalice cada uno de los clubes de Primera A y Nacional B, en vez de colocar uno en la AFA, que era más fácil).
Un gran paso adelante, aunque es apenas el primer paso de muchos otros que SAF espera ansiosamente.
*Periodista y sociólogo