Finalizo mi mandato como Consejera del Consejo de la Magistratura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, ejerciendo su Presidencia, con la tranquilidad de haber podido impulsar aquellas políticas que entendí como prioritarias para la construcción de un Poder Judicial moderno, ágil y eficiente, destacado por su fuerte vocación de servicio hacia el ciudadano y el usuario, y dotado de una infraestructura digna acorde con la importancia y jerarquía de la función judicial.
Fui elegida por la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el 18/12/ 2006, para el período 2006-2010. Durante estos cuatro años integré los principales órganos del Consejo: su Comité Ejecutivo (como Presidente y Vicepresidente del organismo); la Comisión de Selección de Integrantes de la Magistratura y del Ministerio Público (de la cual fui Presidente entre el 21/12/ 2006 y el 07/04/2010); la Comisión de Disciplina y Acusación; la Comisión de Administración Financiera, Infraestructura y Tecnología de la Información y Telecomunicaciones. Esto me permitió tener una participación activa en el diseño y en la ejecución de las políticas del Poder Judicial de la Ciudad, durante todo mi mandato.
Integré también otras Comisiones y órganos auxiliares del Consejo, con misiones y funciones específicas como la CODE (Comisión de Enlace entre el Consejo de la Magistratura y el Ministerio Público); la Comisión Auxiliar de Infraestructura Judicial; y la Comisión Auxiliar de Autonomía, Autarquía y Descentralización del Ministerio Público, lo cual también sirvió a mi gestión dándome un conocimiento más profundo e integral de algunos temas esenciales que hacen a la tarea y a la organización judicial.
Puedo destacar, entre mis principales contribuciones al desarrollo institucional del Poder Judicial y del Consejo, las siguientes: Soy autora del proyecto de Ley de Autonomía Financiera del Poder Judicial, que promueve la autarquía del Poder Judicial la cual no solamente se expresa a través de un sistema de selección de jueces y
magistrados propio y del manejo autónomo de las cuestiones disciplinarias, sino y fundamentalmente con el ejercicio de una administración autárquica.
El mismo contempla un mecanismo de asignación al Poder Judicial de un 5% del presupuesto de la Ciudad de Buenos Aires, que está compuesto por un 3,5 % para los dos fueros de la Justicia local, Contenciosos, administrativo y tributario y para el Penal,
contravencional y de Faltas, que incluye al Consejo de la Magistratura, y un 1,5 % que se aplica al Ministerio Público en sus tres ramas.
Propongo el manejo autónomo del presupuesto –y de los fondos- del Poder Judicial de la Ciudad, lo que permitiría la disposición inmediata de recursos para los gastos corrientes y para la ejecución de proyectos que aseguren un mejor funcionamiento del sistema de justicia.
Este proyecto fue tratado en el ámbito de la Comisión de Administración Financiera, Infraestructura y Tecnología de la Información y Telecomunicaciones (CAFITIT) y remitido para su consideración a la Comisión de Coordinación entre el CM y el MP.
De igual forma fue una de mis mayores preocupaciones mejorar la infraestructura, el equipamiento y los servicios del Poder Judicial y del Ministerio Público, y creo haber cumplido con muchos de los objetivos fijados.
En estos cuatro años logramos incrementar la superficie propia del Poder Judicial de la Ciudad en un 187,88 %. Al año 2010 el Poder Judicial y el Ministerio Público cuentan con sietenuevos edificios propios, adquiridos durante el período 2007-2010: Tuyú 82/86 -488m2; Almirante Brown 1288/98 – 104 m2-; Sarmiento 1981 -76m2-; Libertad 1042/46 – 1.399m2; Beazley 3860 – 3.800m2; Hipólito Irigoyen 932 -3.200m2; y Avda. Cabildo 3067 – 600m2. Un total de casi 9.000 m2 de nuevas y modernas instalaciones equipadas con sistemas de calefacción y refrigeración, de iluminación, de tránsito y de comunicaciones nuevas y de última generación. Además antes de la finalización de la gestión se adquirió para el CM un inmueble que pertenecía al Banco Patagonia ubicado
en Lavalle 369 compuesto por dos plantas, con una superficie de 2000 mts2, cuyos planos prevén la ampliación de 4 plantas más hacia arriba, lo que suma la disponibilidad de un considerable espacio para la mejor prestación del servicio de justicia.
Otra de las principales cuestiones que ocuparon mi mandato fue la definición de una política laboral y salarial justa y que contemple las diferencias funcionales de los agentes del Poder Judicial y del Ministerio Público Puedo afirmar que gestionamos en forma prudente y eficaz los conflictos gremiales que pudieron haber afectado el funcionamiento del Poder Judicial de la Ciudad. Participé de las negociaciones con las
agrupaciones sindicales que representan a los magistrados y funcionarios y con las que actúan en representación de los empleados (la Asociación y la Unión).
Reinstalamos la mesa de diálogo gremial, volviendo a una práctica que tenía el organismo y creamos la comisión para tratar el Reglamento unificado del Ministerio Público y el Consejo de la Magistratura en materia de personal. Además, impulsé la firma de los Acuerdos y Convenios necesarios para la extensión de los beneficios del Régimen Especial de Jubilaciones a los magistrados y funcionarios del Poder Judicial de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, obtuve que el MTEySS dispusiera la extensión del régimen previsional especial a los magistrados e integrantes del Ministerio Público de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; y en 2009, el MTEySS extendió este beneficio a los magistrados y funcionarios del Poder Judicial de la Ciudad Autónoma
de Buenos Aires.
Fui uno de los consejeros que impulsó la creación de la Comisión ad hoc para la Implementación de Políticas Penitenciarias para la Ciudad de Buenos Aires integrada por personalidades destacadas en la materia de su competencia, que constituye un espacio de debate de todos los temas vinculados al diseño de un sistema penitenciario
propio de la Ciudad y a la construcción de unidades carcelarias dependientes del Poder Ejecutivo. Participé activamente en el establecimiento de un sistema adecuado para los niños/as y adolescentes en situación de riesgo o conflicto y para los jóvenes judicializados.
Creamos también el Cuerpo Médico y el Cuerpo de Mediadores del Poder Judicial de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en el ámbito del Consejo. Se crearon las Oficinas de Asistencia al Imputado Privado de su libertad y de Control de las Condiciones de Detención de Personas y de Ejecución de Probations y de las Penas Privativas de Libertad, ambas en el ámbito de la Defensoría General, a fin de instrumentar mecanismos efectivos para asegurar el respeto de los derechos de las personas imputadas, demoradas o arrestadas.
Otro de los aspectos considerados fue la normatización de los diferentes órganos del Consejo dada la experiencia de los diez años de funcionamiento del organismo. Modificamos así los reglamentos de las principales Comisiones del Consejo, siguiendo las sugerencias de quienes fueron, y son, sus principales actores.
Y logramos la edición y publicación de la normativa del Consejo actualizada y concordada, tarea elaborada con excelencia por el Centro de Planificación Estratégica.
Por todo lo expuesto, puedo afirmar que siento haber cumplido con mis expectativas al asumir el cargo y espero haber logrado las metas que tuvieron en mira quienes promovieron mi designación.