El desafío de continuar con el cambio comienza el día 13 de agosto del este año. Las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias serán el primer paso para confirmar lo que los argentinos decidieron en aquellas elecciones del año 2015. Argentina está transitando una nueva etapa en política exterior e interior.
Días atrás, la presidenta de Suiza, Doris Leuthard, en la primera visita de un premier de ese país a la Argentina declaró: “Nos complacen las reformas que en los últimos dos años encaró el Gobierno para disminuir la pobreza, aunque dichos procesos requieran de mucho tiempo”. La expresión de la mandataria Suiza se corresponde con el proceso de cambio que está viviendo nuestro país.
El año pasado, antes de dejar la presidencia, Barack Obama visitó la Argentina y a nuestro Presidente. Fue una clara muestra de un acercamiento estratégico con expectativas de construir futuros acuerdos económicos y políticos. Mauricio Macri y Barack Obama comenzaron relaciones que posiblemente continúen con Donald Trump en unos días. Esto no pasaba en la Argentina desde hace mucho tiempo.
En lo que se refiere a política interior, el gobierno de Mauricio Macri ha tenido que tomar un conjunto de decisiones dolorosas con el objetivo de estabilizar y normalizar la compleja situación de un país golpeado por una década marcada por la falta de políticas coherentes.
Según su definición, “Cambio” es el concepto que denota la transición que ocurre de un estado a otro. Cambio es lo que está ocurriendo desde el 10 de diciembre de 2015. Cambio es dejar de pensar en el corto plazo y proyectar en el largo plazo. Los cambios siempre duelen pero cuando el objetivo es una calidad de vida mejor, vale más que la pena afrontarlos.
Nuestro gobierno quiere transformar las cosas que se venían haciendo realmente mal. En lo que se refiere al conflicto docente que está en agenda hace algunas semanas, la gobernadora de la Provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal realizó una oferta superior, mejoró todos los componentes salariales y subió el piso garantizado la inflación que haya” para este 2017. Baradel y compañía rechazaron la oferta. Siguen sin entender la real situación de la provincia.
Lamentablemente la grieta sigue extiendo, entre los argentinos que están dispuestos a hacer un esfuerzo y aquellos pocos que insisten con poner “palos en la rueda”. Aquellos que quieren que nuestro país se convierta en una potencia regional y los que esperan que al país le vaya mal. Pero mal no nos va a ir, porque estamos profundamente convencidos en lo que tenemos que hacer para cambiar las cosas y salir adelante.