El angostamiento distributivo, cristinismo es kirchnerismo sin tasas chinas ni inclusión social, digamos, tiene su correlato en el agostamiento de la base social y cultural sobre el que opera una épica, para decirlo fácil, de expediente administrativo. Los empleados estatales que están al pedo (los que trabajan tienen menos épica: por ejemplo, filman transeúntes que se bancaron la dictadura) tienen tiempo y necesidad disponible para llenar ese vacío.
Sin embargo, la cosa queda medio freak. Deriva, digamos, en lo freaks.
Los candidatos de la Ley de Medios, ¿hace falta decorar con nombres freaks, cuando todos sabemos quiénes son? hicieron un papelón electoral. No por la justeza de su causa ante una sociedad desagradecida, sino por su evidente chamuyo y falta de propensión al trabajo. Una oligarquía cultural temperalmente inclinada a la vagancia.
Es un poco graciosa la lógica suicida que los parlantes de esa jeringosa que es la obligatoria religión de estado, necesiten, cada dos días, sustituir la realidad por un revanchismo de fantasmas contra fantasmas. La susticuión simbólica del lenguaje de lo real por el lenguaje de la Victoria Permanente, margina el resultado concreto del ensiismarse: cada vez más cerrados, cada vez más pelotudos.
Este círculo vicioso no pasaría de un divertimento en un centro de estudiantes, pero mientras tanto dilapidan los recursos públicos con un candor autocomplaciente que luego deriva en la victimización a lo Giordano. Mucha histeria y pocas nueces.
El acto de Unidos Y Organizados, que se creía muerto por que Cristina lo escondió, revivió ayer en todo su esplendor, mostrando que acá nada cambió. Lo cual suma desconcierto a quienes votaron el conservadurismo popular que hizo del bunker del Menem 2003 una réplica con derechos humanos, para dos días después festejar otro impresionante triunfo: La tenés adentro, Alfredo Casero.
Este disparate de motorman dormido solo puede terminar de una manera: mal.
Para que hasta yo me de cuenta que son vagos y soberbios y que están emborrachándose para negar la realidad…chicos, abran los ojos antes que sea demasiado tarde.