En la pista de largada de la temporada veraniega, varios son los políticos de máximo nivel que se aprestan a salir corriendo a la costa atlántica bonaerense en operativos de instalación o de presencia, aunque también destinarán esfuerzos a Villa Carlos Paz, la perla cordobesa.
Es que pasada la Navidad, la política entra en una fase de hibernación hasta fines de febrero, cuando el engranaje parlamentario, tanto nacional como provincial, comienza a calentar motores (de hecho varias decisiones, como la conformación de las comisiones en ambas cámaras de la Legislatura bonaerense, fueron pospuestas para febrero).
Ciertamente, lo único que se freezará en medio de un calor infernal es la política, siempre y cuando el país no depare sorpresas con crisis intempestivas, como la de las reservas del BCRA y su entonces presidente Martín Redrado, que sacudieron el enero de 2010. O remesones como el diagnóstico errado de cáncer de la Presidenta en diciembre 2011. Por ahora, el verano parece encaminarse a un impasse político con un mar de fondo de crisis económica.
Massa en Pinamar. El líder del Frente Renovador tiene decidido comenzar 2014 con una agenda de alto impacto mediático, y con ese objetivo en mente ya planeó que cada fin de semana de enero visitará la costa bonaerense, haciendo base en la ciudad de Pinamar, moviéndose desde allí a los distintos balnearios.
Según indicaron a NU desde el FR, la idea será permanecer lejos de la playa propiamente dicha y enfocarse en recorridas por los centros comerciales y las peatonales, además de jugar partidos de fútbol a beneficio. Tampoco descarta ser uno de los espectadores del superclásico River-Boca que tradicionalmente se juega en La Feliz.
Desde el comando de campaña massista, hoy en los hechos conducido por Juanjo Álvarez, aseguran que el diputado también se reserva un poco de energía para recorrer otras latitudes: el NOA y NEA, donde su armado es más exiguo, serán probables destinos. Además, analizan presentar un proyecto de ley por semana relativo a la agenda económico-social, para mantener la expectativa legislativa.
El Frente Renovador ya dispone, en tanto, de un subgrupo de dirigentes elegido por Massa para dividirse el país y transmitir su know how político para construir armados locales (aunque “acá todos terminan haciendo un poco de todo y de lo mismo a la vez, porque ese es el estilo de Sergio”, se queja uno de los armadores). Ellos son los senadores bonaerenses Baldomero “Cacho” Álvarez y Roberto Costa (un exsciolista y un exradical) y los diputados provinciales Raúl Pérez y Juan Amondarain, entre otros. “Vamos a proporcionar ayuda política y logística. Pero el que terminará de decidir las acciones siempre será Massa”, remarca uno de ellos, pidiendo reserva.
Los Macri y Vidal. El Jefe de Gobierno debutará en un acto proselitista con su vicejefa el 17 de enero próximo en Mar del Plata. Salvo que se agregue una cita inesperada, ese día será la primera foto de Macri con Vidal que cristalizará su rol de elegida para pelear la gobernación bonaerense en nombre del Pro.
Desde la cúpula del partido se planean varias visitas a la costa atlántica, y se contempla que vayan tanto Vidal como Jorge Macri juntos y por separado, y en otras oportunidades también acompañados por el Jefe de Gobierno.
Vidal primerió y visitó Mar del Plata a mediados de mes. Tuvo su propia conferencia de prensa y hasta se dio el gusto de sacarse una foto con el senador Nito Artaza la noche de aquel viernes en la que fue a ver la obra que encabeza el radical en el teatro Enrique Carreras.
Por su parte, el rol del intendente de Vicente López en la intentona por cimentar un armado en la Provincia está desdibujado. No solo desde su entorno filtran mensajes ambiguos, que varían del desinterés por la Gobernación a una agenda de actividades planificada para todo el verano en pos de instalarse, sino que desde el propio Pro son persistentes las versiones de que la confianza entre los primos está quebrada.
Más allá de la Provincia, Macri no olvida su sueño presidencial y antes de Mar del Plata pisará Córdoba, para participar del tradicional festival de Jesús María y con la mira puesta en consolidar su armado distrital.
Es que, ante el buen resultado electoral del Pro en octubre último en la provincia mediterránea, en Bolívar 1 no le temen a hacer leña del alicaído gobernador De la Sota, con quien terminó todo en malos términos en la previa de cierres de listas de junio. Nunca es tarde para facturar el pasado.